«Spielberg me hizo añorar los tiempos en los que las compañías tenían ganas de hacer una buena película».
¡¡¡Lo ha vuelto a hacer!!! ¡El hombre por el que no pasan los años, el que no baja el listón! STEVEN SPIELBERG ha vuelto a encandilarnos con una de sus obras maestras, esta vez llamada READY PLAYER ONE.
Año 2045, el mundo está sumido en la mayor decadencia que te puedas imaginar, con un medioambiente totalmente destruido y la aparición de toneladas de desperdicios residuales y contaminantes que sirven como refugio para la población humana.
Ante esta situación, las personas logran evadirse de la triste realidad con añoranza a un universo virtual en el que pueden pasar desapercibidos con un avatar personalizado de habilidades ilimitadas y no tienen que lidiar con ese mundo al que han sumido en el abismo. Este nuevo universo es OASIS.
Oasis se pone interesante cuando tras la muerte del creador, James Halliday, este dejó en herencia el control del universo virtual acompañado de una gran fortuna a aquel que encontrase un “Huevo de Pascua” (Easter Egg) que el mismo había escondido.
Esto crea una competición por encontrar las tres llaves que te llevarán finalmente a la recompensa.
Wade Watts en el mundo real, mejor conocido como Parzival en Oasis, se emprenderá a esta nueva aventura con sus amigos para ganar la competición. Este tendrá que enfrentarse al resto de jugadores y clanes que también ansían el tesoro, incluso a IOI, la empresa multimillonaria que controla el planeta con el objetivo de hacerse con el control de Oasis.
La butaca del fondo 
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